Al cumplirse otro aniversario de la muerte del maestro, cuya orquesta vivió tres etapas hasta su consolidación, recordamos la más exitosa de todas, la tercera, que irrumpió con los cantantes Felipe Pirela y Cheo García, una dupla legendaria e imbatible. Desde que fundó su orquesta en 1940, Billo Frómeta tuvo que suspender sus actividades en dos ocasiones:
la primera, para enfrentar un juicio por bigamia, del que salió absuelto; y la segunda, por un absurdo veto de la Asociación Musical, que le prohibió actuar “de por vida ”en Venezuela, por haber supuestamente contratado a un saxofonista extranjero. sta circunstancia lo obliga a irse a Cuba, donde desarrolló una fructífera labor hasta que finalmente le levantan el veto.